lunes, 14 de febrero de 2011

Redencion

Dos golpes bastaron, uno al estomago y el otro a la garganta.
No tuve tiempo a verificar si respiraba por el golpe que le propine en la traquea, solo me enfoque en llevar rápidamente a la joven al hospital. El muy bastardo le amarro tan fuerte las manos con un alambre que las muñequas de ella sangraban profusamente.
Intento de violación dirán después las noticias, noventa días para investigar dirá la justicia y el maldito volverá a las calles a tratar de violar nuevamente a alguna otra jovencita y puede que esa vez no este yo allí para tratar de defenderla, y no la habrá violado solamente a ella, lo habrá hecho con su familia, con su novio y con sus amigos por todo el resto de su vida, y el único castigo que el tendrá sera un par de meses de investigación y a lo mas unos años en la cárcel... una pena muy baja por destruir un grupo humano tan grande.
Espero que el golpe en la garganta le haya destrozado la traquea.

Prefiero que me grite asesino la familia de un delincuente que oír el llanto de la familia de una inocente.

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